Matías Delacroix
Para los entrenadores de gallos, estos son atletas. Para otros, objetos lucrativos; y para algunos, familia.
Desde hace un tiempo venia con la idea de poder hacer una pequeña historia sobre las peleas de Gallo. Estando en Venezuela, y en medio de la pandemia por Coronavirus, estas actividades estaban paradas; en su gran mayoria, eran peleas ilegales a puertas cerradas o bien, sesiones de entrenamientos de los mismos gallos para que no perdieran el training. Para los entrenadores de gallos, son atletas, para otros, objetos lucrativos, y para algunos, familia.
No fue hasta el viaje que hice hacia Haiti que pude dar con estas batallas, en el corazon de un barrio de Petion-Ville, Puerto Principe.
El viaje hacia Haiti fue netamente por el asesinato del presidente Jovenel Moise, pero aproveche de hacer algunas cosas para mas o menos, mostrar la cultura haitiana en medio de todo este revuelo del magnicidio. Una de ellas, era la pelea de gallos.
Di con un lugar super humilde, en la punta de un cerro; hablando con la gente, y como ya se habian acabado, me invitaron a ir a una gallera mucho mas grande, ya con asientos establecidos y enumerados, en donde a partir de las 3 pm empezaban las peleas.
Gallos bien preparados, patas gruesas, algunos sin cresta, se enfrentaban entre si dandole al dueño, si ganaba, una suma de mas o menos unos 14.392 gourde, que en dolares son unos $150.
Acerca del Autor:
Matías Delacroix es fotógrafo independiente. Nacido en Buenos Aires, Argentina – 1989, criado en Chile. Actualmente radicado en Caracas, Venezuela. Tiene más de seis años de experiencia trabajando para periódicos nacionales y agencias internacionales como The Associated Press, AFP, Getty Images, Reuters en Nueva Zelanda, Chile e Islas del Caribe.
Actualmente trabaja como colaborador de The Associated Press, Bloomberg y organizaciones no gubernamentales como Médicos Sin Fronteras en Caracas.
Sitios Web:
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