Ayúdame a Mirar: La Biblia del Reportaje Gráfico
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Ayúdame a Mirar: La Biblia del Reportaje Gráfico
Tino Soriano
Hace más de un cuarto de siglo que decidí ser fotógrafo profesional. Fue a raíz de mi asistencia al Festival Internacional de Fotoperiodismo VISA POUR L’IMAGE, cerca de mi residencia en Banyoles, cuando conocí de primera mano a la flor y nata de los reporteros internacionales. Desde su inicio he visitado este certamen todos los años y he tenido la oportunidad de mantener jugosas conversaciones con muchos de sus protagonistas e incluso exponer ahí. Aquí surgió el germen de un libro que ha estado veinticinco años concibiéndose.
En un principio, temiendo que con el paso del tiempo se me olvidara o simplemente automatizara las aportaciones importantes que en su momento me ayudaron a crecer como reportero, tomé buena nota de ellas. Finalmente he reunido toda la información que considero imprescindible para ser un buen fotógrafo en un ensayo que contiene cientos de citas realizadas por más de 300 autores de todos los tiempos, desarrolladas hasta extremos tan exigentes que al libro le puse el apelativo de “La biblia del reportaje gráfico”.
De la mano del mítico Robert Capa, cuya obra y milagros brotan como un hilo conductor a lo largo de este ensayo, “Ayúdame a mirar” repasa los requisitos que hacen falta para aprender a construir y a compartir historias visuales. La vocación, la elección del tema, la anatomía del acto fotográfico, la ética, la selección gráfica, la venta y, para finalizar, predicciones auspiciadas por los expertos. Además contiene otras informaciones muy valiosas como una lista exhaustiva de becas y de ayudas para desarrollar proyectos fotográficos, el cálculo de los costes de un día de trabajo o una inestimable información sobre derechos de imagen y jurisprudencia que tanto interesa a los practicantes de la fotografía, sean profesionales o aficionados.
Lo más sorprendente de este libro, sin embargo, es su estilo fluido y ameno, salpicado de innumerables anécdotas poco conocidas de los mejores reporteros del mundo, algunas referidas de primera mano, y también un análisis de fotografías históricas como “la muerte de un miliciano” de Robert Capa, cuya autoría me cuestiono a pesar de la gran admiración y el tributo que destilan las páginas de “Ayúdame a mirar” hacia el archiconocido reportero húngaro, inspirador de la mítica agencia Magnum, reconocido entre otros méritos por su esfuerzo para poner en alza los derechos y la obra personal de los fotógrafos. Más adelante os aportaré una muestra.
Lo que desconocía cuando descubrí en el festival de Perpignan el trabajo de los grandes reporteros era que mi portafolio me permitiría acceder como fotógrafo con todos los honores a la National Geographic Society. Desde esta privilegiada plataforma he trabajado codo a codo y he gozado de un acceso envidiable a muchos de los mejores autores del siglo XX, mis colegas en la prestigiosa Sociedad, lo que le proporciona a esta obra el aliciente de una larga vida profesional que enriquece aún más el contenido de “Ayúdame a mirar”, porque conjuga la teoría con innumerables experiencias prácticas.
Consejos, historias, inspiración, análisis, estrategia y conocimientos fácilmente aplicables hacen de esta biblia del reportaje gráfico “un libro de consulta amable, práctico y entretenido para los profesionales, los aprendices y los curiosos” en palabras de Mariano López, el director de la revista VIAJAR, una de las publicaciones más receptivas con mi obra. Se trata, para definirlo en pocas palabras, de una historia reciente de la fotografía repleta de innumerables anécdotas y basada en las lecciones de los grandes maestros. Un libro ideal para un público inteligente y ávido de mejorar en conceptos que difícilmente encontrará en otras publicaciones.
He aquí algunas anécdotas, muchas desconocidas, que se cuentan en “Ayúdame a mirar”:
Robert Capa, un fotógrafo que pasó a la historia por su mirada y por su encanto, abordaba sus sujetos con empatía. No en vano, siendo un humilde reportero y sin apenas medios para subsistir, conquistaría años más tarde el corazón de Ingrid Bergman, una de las actrices más admiradas de su tiempo. En una entrevista en la revista US Camera en el año 1943, la protagonista de Casablanca describía la estrategia con la que el fotógrafo se aproximaba a las personas: “Capa hacía amistades, sencillamente, porque mostraba un interés sincero y una sincera cordialidad. […] Hablaba con las personas a las que iba a fotografiar, iba a sus casas, jugaba con los niños y compartía un cigarrillo o una cerveza. Después se ponía a hacer fotos […]. A veces sugería que hicieran algo, pero nunca les pedía que posaran. Al conocer el contexto en el que vivían, podía anticiparse a las acciones y los movimientos necesarios para contar la historia, sin necesidad de provocarlos. Siempre daba el mismo consejo, muy sencillo y muy sensato, a los fotógrafos aficionados: «Disfruta de la gente y haz que la gente sepa que estás disfrutando»”.
Richard Whelan, el biógrafo oficial de Capa, detalló el primer encuentro entre el reportero y la actriz, una aproximación ingeniosa y cordial. El húngaro cenaba en compañía del dramaturgo Irwin Shaw cerca de la recepción del hotel Ritz 5 cuando apareció Ingrid Bergman. Los dos decidieron enviarle una nota que decía:
“Asunto: cena el 6-6-45. París, Francia
Miss Ingrid Bergman
1. Este es un esfuerzo colectivo. El colectivo está formado por Bob Capa e Irwin Shaw.
2. Habíamos pensado enviarle flores con esta nota, invitándola a cenar esta noche, pero, tras las pertinentes consultas, nos hemos dado cuenta de que, o pagábamos las flores, o pagábamos la cena, pero no podíamos pagar las dos cosas. Tras someterlo a votación ha ganado la cena por un estrecho margen.
3. Se ha sugerido que, en caso de que la cena le trajera sin cuidado, podríamos enviarle las flores. Por el momento, no se ha tomado una decisión al respecto.
4. Flores aparte, tenemos un montón de dudosas cualidades.
5. Si seguimos escribiendo, no tendremos nada de qué hablar, ya que nuestra provisión de encanto es limitada.
6. La llamaremos a las seis y cuarto.
7. Nosotros no dormimos.
Firmado:
Expectantes”
Bergman no les conocía, pero aceptó una invitación que fue el principio de un largo romance con Robert Capa. Su relación, además de generar un flujo de fotografías íntimas de los principales actores de Hollywood de la época, dio lugar a un frustrado guión para una película que con el tiempo se convirtió en un delicioso libro que documenta las vivencias del reportero durante la Segunda Guerra Mundial. Novelado para los fines que fue concebido y por esa razón, Ligeramente desenfocado, como lo tituló.
El anecdotario de éxitos y de situaciones embarazosas de los reporteros gráficos es inagotable. Cuesta imaginarse a un fotógrafo regordete y con barba disfrazado de señora embarazada a punto de dar a luz, para llegar hasta la habitación del hospital de Figueres donde agonizaba Salvador Dalí. En realidad, Miquel Ruiz no buscaba conseguir esa exclusiva. Solo apostó con sus compañeros que sería capaz de traspasar el cinturón de policías y militares que custodiaban la habitación. En Girona se las gastan de esa guisa. Le dio un ataque de risa cuando llegó a la puerta y todavía reía cuando salió del hospital, sin tocar el suelo, descubierto en el último momento por los servicios de seguridad. Pedro Madueño, al contrario, estuvo dos años tocando a la puerta de la Torre de Galatea para conseguir los retratos que al final pudo tomar del pintor de Portlligat. Estrategia y tenacidad.
Anécdotas que ilustran los recursos de los reporteros para conseguir las mejores imágenes no te faltarán en este libro, incluyendo algunas actitudes suicidas como la que explicaba Enrique Pérez de Rozas en el programa de TV3 Fotografies: cuando se casó el príncipe Rainiero de Mónaco con Grace Kelly, los paparazzi iban locos por conseguir una foto no oficial de la pareja porque, por razones de protocolo, se desplazaban por separado. Una filtración les informó que al día siguiente viajarían juntos, y un grupo de reporteros se apostó en una curva para obtener el documento. «Para detener el vehículo —recuerda Pérez de Rozas—, dos colegas se tiraron a la carretera y podrían haberles atropellado con facilidad».
Pero la acción más contundente para ilustrar el carácter de un auténtico emprendedor se la podríamos otorgar al francés Charles Bonnay. Según una historia apócrifa que le contó el editor Sean Callahan a Howard Chapnick, el día que se presentó a buscar trabajo al despacho de Roger Thérond, el redactor jefe de Paris Match le exigió que aportara una buena razón para contratarle. Bonnay le respondió:
-Porque soy imprescindible para ustedes. Hago lo que no hacen los demás.
Y acto seguido abrió la ventana y saltó a la calle desde un segundo piso.
Cuando Thérond, lívido, asomó la cabeza esperando ver el cadáver del suicida reventado contra el pavimento, se encontró a Charles Bonnay de pie, sacudiéndose el polvo de la americana, mientras le decía: «¿Ha visto?». Inmediatamente empezó a trabajar para la revista. El secreto es que había sido paracaidista y había aprendido a caer bien desde las alturas.
Finalmente, puesto que las ilustraciones del “Ayúdame a mirar” no se pueden reproducir sin el permiso de sus autores o sus representantes, dado que muchas son fotografías históricas, os propongo un pequeño portafolio extraído del libro que aparecerá este año “Fotografía con una sonrisa” (Photoclub Anaya).
Biografía:
Tino Soriano ha sido premiado varias veces por la Unesco y es recipiente del prestigioso Lente de Plata Mexicano. Posee cuatro galardones Fotopres, Fotógrafo Español del Año Fujifilm, NikonPro, Canon-Europa, la distinción “The Essence of Humanity” y un World Press Photo en la categoría Arte.
En el año 2018 la Generalitat de Cataluña le concedió el Premio Nacional de Comunicación en la modalidad Prensa. Un año antes fue galardonado con el Premio Nacional Piedad Isla por su labor profesional y docente a lo largo de tres décadas. La Sociedad Geográfica Española le otorgó el Premio Imagen-2015 por su trayectoria como fotógrafo y viajero.
Lleva más de veinte años colaborando con la National Geographic Society y ha ilustrado ocho libros de viajes por encargo para ellos: “Toscana”, “España”, “Roma”, “Sicilia”, “Madrid” “Portugal”, “Nápoles y el sur de Italia” y “Grandes viajes en tren por el mundo” además de participar en innumerables proyectos editoriales individuales y colectivos y publicar en los medios más prestigiosos del planeta.
Antes de vivir de la fotografía profesional se dedicó a la docencia. Por eso es un experto conferenciante y conductor de talleres sobre fotografía humanista y reportaje en toda la geografía española, aunque también ha dirigido viajes fotográficos en países como México, USA, Etiopía, Myanmar, India, Filipinas, Perú o China y ha dado tres veces la vuelta al mundo, la última por encargo de Olympus y las otras dos para la revista Viajar.
Protagonista de tres documentales en televisión “Andalucía, el despertar de los sentidos”, “Kardelen, la nueva esperanza de Turquía” e “Historias del Mar: Protegiendo los Océanos” para National Geographic Channel, ha recibido reconocimientos de l’Academia de Ciències Mèdiques de Catalunya y de la OMS por su divulgación del mundo de la medicina desde la década de los ochenta. Forma parte del reducido grupo de fotógrafos en la página oficial de la National Geographic Society en Washington D.C.
Finalmente ha escrito e ilustrado numerosos libros de fotoperiodismo y fotografía. “Los Secretos de la Fotografía de Viajes” (PhotoClub Anaya-2018), “Ayúdame a mirar” (PhotoClub Anaya-2019), “Fotografía con una sonrisa” (PhotoClub Anaya-2020) y “BanyoleSpeculum” (2020) han sido sus últimos ensayos.
Equipo Fotográfico:
– Cámara y óptica Olympus OM-D
Sitio web: www.tinosoriano.com
Instagram: https://www.instagram.com/tinosoriano/
Facebook: https://www.facebook.com/tinosoriano