+8 Nayeli Cruz: Dormir con un agujero en el alma
Guatemala es el país con la tasa más alta de desnutrición crónica en América Latina y el cuarto en el mundo, según cifras del Banco Mundial. En este artículo la fotoperiodista del diario El País, Nayeli Cruz, se adentra en la intimidad de los habitantes de la comunidad rural de Comitancillo para descubrir a las personas detras de las estadísticas.
Dicen las abuelas que a través de la comida se deleita el alma, pero ¿qué sucede cuando el alimento es escaso y se vive al día con un puñado de maíz y unos cuantos chiles secos?
La tierra de América es rica en productos naturales y seduce por su diversidad gastronómica y sabores únicos, sin embargo más de sesenta millones de personas viven con hambre en el continente. En este escenario, pensar en el futuro es preguntarse si habrá comida para el día siguiente; el presente es dormir con el estómago vacío.
Guatemala es el país con la tasa más alta de desnutrición crónica en América Latina y el cuarto en el mundo, según cifras del Banco Mundial. Frijoles, arroz, maíz, chiles todo en raciones escasas, es la dieta de supervivencia de muchos guatemaltecos. El departamento de San Marcos es una de las zonas más afectadas por el hambre en este país y el Programa Mundial de Alimentos ha advertido que el cincuenta por ciento de las familias no tienen acceso a una alimentación balanceada. La desnutrición golpea con mayor dureza a la población indígena de la zona y más de la mitad de los niños viven con desnutrición.
Hace unos meses pude visitar algunos de estos hogares. La cocina de Julieta Crisóstomo, de 53 años, tenía únicamente un frasco de chiles secos que cocinaría para toda la semana y debía alcanzar para su pequeño nieto, de un año de edad. Julieta migra cada año a la capital para trabajar y obtener algunos ahorros que le permitan subsistir, ya que la mayoría de sus hijos han dejado el país buscando una mejor vida.
Me conmovió conocer a Maria Leticia y a su madre. Nos permitieron acompañarlas al cocinar pero no pudimos conversar mucho ya que apenas entendían mi español; su lengua nativa es el quiché. Molían chiles con semillas de maíz y agua para lograr una masa roja que se mezcla con chícharos. Esa sopa es acompañada con café y algunos tamales. Tenían las porciones contadas; sin embargo, me invitaron a acompañarles a la mesa y comer con ellas, ya tenían listos dos platos más. Mi compañero y yo nos negamos, por supuesto, y ellas se despidieron cálidamente.
En 2009 el gobierno declaró “estado de calamidad pública” provocado por la hambruna que azotó a la población y la situación no ha mejorado desde entonces. La pandemia ha sido otro factor que ha puesto en desventaja a muchas familias, quienes buscan en la migración una oportunidad para darle una mejor vida a sus seres queridos. En estas áridas montañas, dormir con hambre es la única certeza con la que se vive.
Acerca de Nayeli Cruz:
Cursó la Licenciatura en Psicología en la Universidad Nacional Autónoma de México. Ha participado en diversas exposiciones colectivas en México. Fue ganadora del segundo lugar en el concurso latinoamericano “Fotógrafas LATAM” y forma parte del catálogo “LAF8 Latin American Photography” de la asociación norteamericana American Illustration and Photography. Fue ganadora del 3er lugar en la categoría “Cuidadores” del POY LATAM 2021.
Su trabajo ha sido exhibido en Colombia, Paris, Leipzig, y Nueva York y se ha publicado en diversos medios impresos y electrónicos. Actualmente es parte del staff del diario El País.
Equipo:
Cámara: Sony Alpha 7III
Óptica: 16-50mm f/ 3.5 – 5-6, 24 – 240mm f/3.5 – 6.3
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